martes, 9 de diciembre de 2008

Sin futuro a la vista


Hubo un momento en el que Palencia era una provincia ilusionada. La Renault abrió una gran factoría de montaje y dio empleo a una multitud de trabajadores bien pagados. La minería del carbón estaba en plena ebullición y ocupaba a miles de norteños entre sus fauces. Varias azucareras molturaban la remolacha que se extendía gracias a los inicios del regadío moderno. Parte de su producto lo adquiría Fontaneda, todavía enseña palentina. La Calle Mayor se llenaba entonces de nuevos y luminosos comercios, situados en un centro histórico que por fin se comenzaba a rehabilitar con cierto criterio. Incluso se proyectaba en medio de unos terrenos pedregosos algo así como un Valle del Cerrato D'Or, donde habitarían unos 40.000 habitantes con todas las dotaciones imaginables. Culturalmente, no recuerdo mejor temporada. Estaban abiertas 22 salas de cine, los auditorios de las Cajas de Ahorro programaban eventos con asiduidad y el Teatro Principal, recién reinaugurado por nuestra homófoba reina, acogía siempre algún espectáculo nacional en gira.

Los análisis actuales apuntan a que es probable que Palencia no salga ya de esta depresión. La Fasa ha vuelto a conceder a la fábrica de Villamuriel la exclusiva mundial del nuevo Megane. Esto garantiza una fuerte inyección de empleo durante tres o cuatro años más. Después, no hay nada claro acerca de su continuidad. El resto del tejido industrial se ha ido desmantelando y la alternativa es colocarse en algún centro de atención la tercera edad. Tampoco hay casi gente joven, casi todos emigramos en busca de otras expectativas de vida. Por eso, cada vez hay menos cultura y las posibilidades de diversión y de ocio racanean


Quizá el mismo título de este post evidencia el carácter castellano. Sin futuro, como si nuestras desgracias ya estuvieran escritas. Siempre a la espera que desde fuera nos venga algo. Sin iniciativa propia.


viernes, 5 de diciembre de 2008

No sé si podré terminar


Desde la ventana de aquel autobús, probablemente fui consciente por primera vez de que algo no se desenvolvía con naturalidad en mi vida. Volvía ya a casa, después de una mañana en la Universidad, en Valladolid. Les vi cruzar la calle y no pude dejar de seguirle con la mirada. Me sentí extraño, aunque no supe precisar por qué.

Cuando apareció por la facultad varias semanas antes para buscar a su novia, me quedé sin capacidad de proseguir con la conversación hacia mis compañeras. Algo se revolvió dentro de mí, pero la burbuja de la que me rodeaba me impedía llegar a discernirlo. Ya está, decidí, esto me pasa porque quiero ser como él, así de guapo, con aire de chico listo, su estilo, su cuerpo... Para mí era lo fácil.

Desde entonces, me fui acercando más a su novia, que me parecía una tía de lo más agradable. Con el pretexto de contarle cosas de su próximo destino Erasmus, donde mi mejor amigo llevaba un año pataleando, pasamos algunos ratos juntos, sin llegar a ninguna relación cercana. Cuando él volvía a hacer presencia, siempre era motivo de trastorno para mí. Nunca llegué a hablar con él. Mi compañera finalmente se fue al extranjero y él lo pasó mal. Sin embargo, siguió saliendo, divirtiéndose, lo normal para un chico de 21 años. Una noche bebió más de la cuenta e hizo algo que en otras condiciones de mayor control no se le hubiera ocurrido: se enrolló con otra. Lo que sentía hacia su pareja era tan fuerte que no pudo soportar la idea de afrontar el contárselo. Antes de que ella regresara, se tiró por la ventana de su casa y se mató.

Hacer las cosas bien no es fácil. Tratar con las personas a las que quieres recome a veces el alma. Cometemos actos que nos complican más allá de lo esperado. No he encontrado aún el arte del término medio, ese equilibrio que ayuda a mantenerse estable dentro de esa emoción vital que tú tan bien conoces.

martes, 2 de diciembre de 2008

La de la esquina




Me gusta comprar los libros en la librería de la esquina. La selección de títulos que realiza me parece exquisita. Se trata de un local muy pequeño, pero con tres ambientes bien diferenciados, cada uno decorado con sencillez y buen gusto. La tienda suele estar muy concurrida de público no sólo del barrio, sino llegado de todos los puntos de Madrid. Con cierta contención, me importa poco lo que me cobren por las novelas, las obras divulgativas o los artículos de regalo que incluyen entre su oferta. Considero una garantía de acierto y un placer espiritual adquirir algo allí.

Hay una librería también muy tradicional en el centro, casi al lado de la Puerta del Sol. El núcleo de sus ventas lo constituyen los libros de texto. Las colas que se forman ante su entrada a mediados de Septiembre son ya imágenes clásicas en los telediarios que informan de la vuelta al cole. Los padres se dejan entonces un dineral en material escolar. La ley lo ampara, impidiendo la libre fijación del precio de los libros de texto.

Supongamos que el Parlamento promulga una normativa que liberaliza el mercado de los libros de texto. Ya imagino a los responsables de los hipermercados frotándose las manos. Rebajarían su precio incluso por debajo del coste, empleándolo como efecto gancho para atraer a más clientes. Sin embargo, el comercio de la Puerta del Sol no se lo podría permitir y, a no ser que se recicle, probablemente acabaría cerrando. Me podría beneficiar doblemente de este abandono. Por un lado, dejaría de subvencionar artificialmente sus ingresos, fomentando que sus empleados y su capital se inviertan en otras actividades más productivas. Por otro, al ahorrarme un porcentaje considerable en la adquisición de libros de texto, podría disponer de mayor renta para gastarme en la librería de la esquina. Porque allí voy a seguir acudiendo, aunque el libro que me vendan esté también en los escaparates de la FNAC.


viernes, 28 de noviembre de 2008

En rosa



Con el metro abarrotado a la hora de salida en masa de la oficina, me tuve que apretar contra ti. Tú en el asiento del fondo. Yo apoyado en la puerta. Tanto me presionaba la cerilla de al lado, que acabé aplastado junto a tu brazo izquierdo. Pero ni te enteraste, pues ya estabas dando cabezadas. Tu día debió resultar muy duro. Las clases, supongo, combinadas con el último fracaso personal. Determinaste, inconsciente, que mi costado era el mejor reposo para tu cabeza. Por eso, te comencé a acariciar el pelo, con riesgo de deshacer sus improvisadas ondulaciones. Para terminar siempre en tus cejas, apenas seda en ciernes. La pareja de enfrente nos miraba con aire entre complacido y melancólico. Siete estaciones pasaron.

Entonces te despertaste. Al permitir fluir la mirada, tus ojos saltones se encontraron con mi rubor. Tus labios trataron de desprender un susurro que quedó atrapado entre sus carnes. Pero acerté a entender

Hola. Me llamo Miguel.

Eso dijiste. Tu nombre. Así fue cómo aprendí tu nombre. Me dijiste tu nombre y yo me quedé con él.

miércoles, 26 de noviembre de 2008

Saberlo


Si pasáramos por la vida como un hada ignorante probablemente seríamos más felices. Aunque detrás de la máscara de carnaval se oculte mucho sufrimiento.

sábado, 22 de noviembre de 2008

Aprovechando la coyuntura


De repente, el Ayuntamiento de Madrid se ha dado cuenta de que los porteros de discoteca son unos matones y ha decido iniciar un rosario de cierre de locales. ¡Qué típico resulta actuar a golpe de tragedia! Lo peor es que tales decisiones esconden la propia incompetencia del consistorio para hacer cumplir en todo momento la normativa municipal. Y es que, además, resultan lamentables las dificultades que cualquier empresario se encuentra a la hora de abrir un negocio u obtener una licencia sin disfrutar de algún guateque nocturno.

Para desgracia colectiva, Madrid carece de salas decentes para conciertos. De ahí que las grandes giras internacionales suelan pasar de largo. Otras veces uno siente vergüenza al observar qué tipo de lugares acogen eventos maltratados. La cultura no está de moda en la ciudad. A uno se le cae el alma a los pies cuando pasea por la Gran Vía observando cómo cines históricos son reconvertidos en restaurantes o cadenas de ropa, mientras otros permanecen cerrados, en un estado de semi ruina, contribuyendo así al deterioro social de la zona. La especulación autóctona también transforma teatros en apartamentos de lujo, derriba los símbolos de la memoria histórica y planifica carísimos museos a costa del bienestar de los vecinos.

Quizá la culpa la tengamos también nosotros. Por ir al cine al parque comercial de la salida de la Nacional de turno; por no vivir en el centro; por depender tanto del coche privado; por preferir la TV a Mahler; por estar atados a trabajos basura cuyos sueldos no permiten muchos aspavientos; por no tener interés en conocer la música generada al norte de un paralelo que no recuerdo; y por ser tan poco sensibles como para no poder soltar unas lágrimas ante un espectáculo de danza contemporánea. Cosas del capitalismo refundado.


lunes, 17 de noviembre de 2008

Mucho en un año


Ha ocurrido casi sin ser conscientes de ello. Tú seguro que ni si quiera de acuerdas, pues no le das importancia a esto de las fechas. Lo mismo me sucede a mí, pero es que ésta es especial. Huía de Madrid aquel fin de semana, agobiado por el entorno e impulsado por una necesidad de hacer algo diferente al encasillamiento que suelo evidenciar. Entre los destinos posibles, seleccioné Barcelona, porque tampoco quería sentirme solo.


Allí te conocí.

Era 17 de Noviembre de 2007. Sábado por la noche. (Por cierto, no sé si te habías dado cuenta de que cuando un año el día 17 de Noviembre cae en sábado, en el siguiente cae en domingo. Sin embargo, hoy es lunes. La explicación es que 2008 tuvo que ser bisiesto e incorporó en su calendario a un maldito 29 de Febrero. Es igual. Vamos a pensar que en realidad te conocí un día 18, ya que habían pasado las 12 de la noche. Es fácil resolver los entuertos siempre que haya voluntad). Estaba en una de las discotecas clásicas de lo que algunos llaman el ambiente, aunque a mí no me guste. Te pedí una copa de vodka con naranja, pero pudiste poner lo que te diera la gana, porque me quedé ensimismado mirándote. Tal estado prosiguió el resto de la noche, mientras hacia el tonto con mi acompañante. Y, curiosamente, tú tampoco dejabas de mirarme. Te hice un gesto cuando me iba, ya cerca de la hora del cierre. Pero cuando estaba en la puerta tuve que dar marcha atrás y regresé a no se qué. Hablar probablemente. Saber quién eras. Cómo te llamabas. O mirarte más de cerca. Y besarte, claro.

Desde entonces hasta ahora. Tras intensos chats, tormentas tropicales, visitas incrédulas, polvos mágicos, llamadas interminables, crisis de diversos tipos, viajes en la historia, hoteles por doquier, dudas razonables, playas prohibidas, comidas novedosas.... No ha faltado intensidad en tu mirada. También nos hemos enamorado de Kyle, aunque luego titubeamos algo Perdidos, quizá aturdidos por el humo de la shisha. Y los vinos han sustituido a tus Fantas durante muchos momentos curiosos y particulares. 

Lo que no han cambiado desde el primer día son mis ganas de que se acerque la próxima vez de volver a verte.





domingo, 9 de noviembre de 2008

Triste comparación


Palencia se muere y no sólo en las estadísticas. Con un simple paseo por la calle Mayor, donde uno no puede dejar de sorprenderse ante la cantidad de gente que se puede "permitir" estar al solillo un viernes por la mañana, se pueden apreciar cúantos locales se encuentran vacíos. Aquí, las asociaciones de vecinos dictan la política municipal. Por ejemplo, el año pasado la prioridad de la AA.VV. de El Carmen expuso al alcalde la imperiosa necesidad de contar con una fuente cibernética en el centro de Plaza de España. Y ahora presumimos de chorros. Quizá estas frivolidades se pueden permitir porque la mayor parte de las necesidades básicas ya se encuentran satisfechas. Con 80.000 habitantes, el volumen de instaciones deportivas públicas, por ejemplo, es muy llamativo: una pista de atletismo, dos campos de fútbol, tres piscinas cubiertas, cuatro al aire libre, cinco pabellones multiusosos...


Lo más preocupante es que las personas de mi generación nos hemos tenido que ir la mayoría, ya sea obligados por una necesidad laboral o axifisiados por un ambiente en el que prepondera el qué dirán. El destino predilecto ha sido Madrid. Una ciudad en la que el ayuntamiento congela las inversiones para dotaciones sociales en los barrios  porque las arcas de la villa están agotadas, desquiciadas bajo tierra. Desgraciadamente, la capital del Estado no dispone aún de suficientes infraestructuras como para permitirse semejantes lujos. La zona centro está especialmente dejada, excusándose siempre en que no existe suelo disponible. Pero para construir impresionantes museos, siempre hay hueco. Eso sí, apostamos por ser sede de los Juegos Olímpicos, que siempre queda muy bien de cara al exterior, aunque los que vivimos en Madrid no tengamos donde hacer deporte.




domingo, 19 de octubre de 2008

Aquellos sí que eran discursos


Comunistas. Los más recalcitrantes liberales de gloriosa enjundia, que han tenido a bien gobernarnos plácidamente durante las últimas décadas, se están convirtiendo en grandes banqueros (sin dejar de ser políticos) ... Socialización de las pérdidas.

Judíos. Se critica al PP, que parece que no apoya lo suficiente al gobierno.  Sería interesante que dimitiera la oposición ... Habrá que circuncidar a Rajoy.

Masones. Parece que no sirve de nada apostatar, porque, por mucho que uno lo intente, la Iglesia no te desapunta de eso de ser católico. Pero eso no significa que incumplan la Ley Orgánica de Protección de Datos porque no archiva las hojas bautismales por orden alfabético ... Menos mal que no hay quien acabe con el orden natural establecido.


Lo tengo. Organicemos un contubernio que nacionalice a la COPE y fusione a los grupos del Parlamento. Para que luego no tengamos que lamentarnos ante ningún muro.








viernes, 17 de octubre de 2008

Anhelo político


Este gobierno que el pueblo nos ha concedido tiene que hacer algo al respecto. La legislación que ha promovido se ha caracterizado siempre por su progresismo en el ámbito de lo social. Bastaría incluso con que incluyeran la lección en la asignatura de Educación para la Ciudadanía. Pero además, en este caso particular, se trata de defender los legítimos intereses de la patria, así como de proteger la salud de los individuos con buen gusto.

Por favor, que se prohíba el reggaeton ya.


miércoles, 15 de octubre de 2008

Espanya


Ver bailar sardanas es una buena forma de pasar la mañana del Día de la Raza.


miércoles, 8 de octubre de 2008

La crisis de las terrazas llenas


El pasado verano, todo el mundo hablaba ya de crisis. Sin embargo, resultaba imposible encontrar un hueco donde sentarse en Argumosa. El batacazo con la llegada del otoño ha sido tremendo (no tanto, claro, como la nueva incorporación al gimnasio). La nueva sociedad hiperinformada ha adelantado psicológicamente los efectos de la ralentización. De libro, pero con mayor vigor que nunca.

En apenas un mes mi empresa ha pasado de necesitar desesperadamente nuevo personal a no renovar contratos. Si uno osa a salir por La Latina un miércoles, el ambiente puede llegar a deprimir. Ya no hay que reservar restaurantes ni siquiera el fin de semana, mientras que se puede acudir a la peluquería de moda sin cita previa. Además, estoy emocionado por las debacles bancarias, por el escandaloso afán intervencionista evidenciado por confusos liberales y por el pánico desatado en los mercados financieros. 

Únicamente falta que salga el ejército a la calle para apaciguar a unos hipotéticos ciudadanos alborotadores. Entonces ya lo tendré absolutamente claro para invertir todos mis ahorros en la bolsa.



viernes, 3 de octubre de 2008

En la cama


No sé por qué, pero los cabreos con mi pareja me excitan. Cuando llegué aquella tarde a casa tras salir de la oficina, llevaba muchas horas sin saber de Javier. Nunca nos había durado tanto el enfado y, apesar de que la discusión del día anterior había sido potente, estaba preocupado. Y excitado. Por eso, me dirigí hacia el piso superior, a la habitación en la que él me venía acompañando prácticamente cada noche en los últimos tres meses, desde que nos miramos de forma tan libidinosa durante la presentación del libro de Isabel.

Le encontré bajo la sábana y el nórdico, vuelto hacia la pared, completamente a oscuras, y no quise despertarle. Así que me puse a hacer la comida, empleando una dosis mayor de ingredientes por si finalmente Javier se decía a levantarse. No hice sobremesa y prescindí de la siesta porque a esas alturas debía fomentar nuestra reconciliación, a través de mis medios habituales. Pasé antes por el baño y salí de ahí ya con el condón puesto. En silencio, me aproximé hacia el borde la cama y retiré la ropa. Pero cuando le quise abrir el culo para ponerle la correspondiente dosis de lubricante, noté algo raro. Estaba muy frío. Como aún no había reaccionado, le di la vuelta para verle la cara. Me quedé paralizado con la imagen de una cara tan preciosa, transformada de aquella manera. A mi grito de impresión le siguió un salto hacia atrás que me hizo tropezar con la mesilla y caer de cabeza contra la moqueta.

Debí perder el conocimiento durante unas dos horas, justo hasta que comenzaba el turno de Manuela. Reaccioné entre un charco de agua procedente del cubo que la asistenta había vertido sobre mí para espabilarme. El hedor era terrible, puesto que no tiene costumbre de tirar el agua sucia y el que empleó correspondía a la dura sesión de limpieza de la semana anterior. En cuanto terminó conmigo, Manuela hizo lo propio con Javier, consiguiendo nulos resultados. Está muerto, le sollocé, percátándome de nuevo de la situación. Iba a llamar al 112 pero me encontraba mareado. ¿Pero qué ha pasado? Deja, deja, ahora me cuentas, yo lo haré. Pero antes voy a recoger un poco este estropicio, que está todo indecente. Al fin y al cabo, para eso la pagaba. Y vístete y quítate esa cosa que llevas puesta en la polla, añadió impenitente.

El levantamiento del cadáver fue muy pulcro. Manuela supervisó todo el proceso, de modo que los funcionarios del juzgado no rallaran ningún mueble. La autopsia reveló que Javier había fallecido de un infarto, provocado por una situación de pánico intenso. De ahí la repelente contracción de sus facciones. Yo no conocía que padecía de arritmias. En caso contrario, habría sido mucho más claro con Giusseppe, rogándole que nunca bajara del desván mientras Javier permaneciera en casa.


jueves, 25 de septiembre de 2008

Si todo fuera así


A las 08:15h de la mañana, un hombre circula en bicicleta entre el tráfico infernal del Paseo de la Florida. Lleva acoplada una silla desde donde un niño de unos 5 años observa, curioso, el caos a su alrededor. Carga al hombreo con una mochila y soporta, casi sin percatarse, los primeros fríos del otoño. Sin duda, va al cole en transporte ecológico.

Hay momentos en los que incluso me gusta Madrid.

sábado, 20 de septiembre de 2008

Color sepia


Los recuerdos se arrugan en la memoria como fotografías antiguas.
Se las enseñamos con satisfacción a las visitas, pero permanecen archivadas para los de casa. Y dificilmente accesibles para uno mismo. Por fortuna. A veces. Sólo a veces.

miércoles, 17 de septiembre de 2008

Fi de l'estiu


Se quiebran las palabras.





sábado, 9 de agosto de 2008

Compendio actual


Una fuente de agua fresca. Para aliviar la sed de libertad.
Demasiadas ataduras, enraizadas en el pasado, que se enquistan con virulencia feroz. Hay hambre de justicia.
Y ahora apelamos a la racionalidad con tal de salvaguardar el orden establecido. Cuando, para mantener la ilusión, habría resultado suficiente con haberlo sido siempre.

(Dicen que hay un Mecano para cada momento. Y esta canción no es la que corresponde.)

miércoles, 6 de agosto de 2008

Desde la ventana


Con lo pudorosos que tendemos a ser, parece mentira la facilidad que mostramos a la hora de exponernos desnudos ante los vecinos.

domingo, 3 de agosto de 2008

Una decisión menos



(Algunos) de mis compañeros me tienen mucho aprecio. Mis jefes guardan (en general) una opinión favorable y a veces se nota que me intentan cuidar. En el cliente me muestran hasta cierto cariño (personal). Las continuas y delicadas gestiones han desembocado en que los beneficios de mi proyecto estén alcanzando niveles nunca vistos (que provocan asco). Me han subido el sueldo bastante más que la media (aunque me sigo quejando). (Salvo situaciones puntuales) cumplo estrictamente mi horario y consigo desconectar con facilidad. Voy de por libre, (apenas) tengo que dar explicaciones a nadie.

Sin embargo, por fin lo tengo claro. Necesito un cambio de trabajo. No sé el tiempo que me llevará. Lo he decidido y estoy dispuesto a poner los recursos necesarios para conseguirlo. Aquí ya no queda una evolución que me resulte atractiva. Y, de ningún modo, pretendo llegar a convertirme en un personaje similar a lo que se tercia alrededor. Me ha costado obtener esta conclusión, pero allá voy.

jueves, 24 de julio de 2008

Demasiada diferencia de edad


Hay en El Retiro un ahuehuete que probablente fue plantado en 1.633. Algunos ejemplares de esta especie, localizados en México, alcanzan una antigüedad de 6.000 años.

¿Los árboles serán conscientes de lo que sucede a su alrededor? Espero que no. Mucho ha cambiado el mundo durante estos últimos milenios. Sobre todo si lo intentamos medir en base a nuestra propia longevidad.

martes, 22 de julio de 2008

Muy verde



Fruto de la inquietud ecologista de este gobierno, tras las últimas elecciones desapareció el Ministerio de Medio Ambiente. Ahora, sus competencias las asume Agricultura, que pasa a denominarse Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino. Aunque suene contradictorio, nos lo vendieron como ejemplo de su modelo de prioridades políticas.


Frente a la sede de dicho departamento, en la Glorieta de Carlos V, había un coqueto jardín. Dos árboles rodeados de una pequeña zona verde, que nunca estuvo bien cuidada. El mes pasado sustituyeron el césped por un conglomerado de material sintético. Nuevos tiempos. Todo artificial.





viernes, 18 de julio de 2008

Dominado


Nos rebozamos continuamente entre el asqueamiento que nos provoca esta sociedad que no nos concede oportunidades suficientes para ser felices.

Ya hay ministras de mi edad. Gente de mi generación se ha convertido en la clase dominante.


Esto no es lo que esperábamos, ¿eh?


miércoles, 18 de junio de 2008

Deporte en evolución


De pequeño, las tardes de los sábados culminaban en una fiesta culinaria casera a base de pizzas y sandwiches varios que mi madre cocinaba en el horno de gas butano. Nos servían para acompañar el partido de liga que ponían en la Segunda cadena de TVE. Entonces veía hasta los partidos de pretemporada del Madrid. Pero el baloncesto era mi favorito, e incluso jugaba en el equipo del cole. En clase de gimnasia aprendí también voleibol, beisbol, badminton, fútbol, balonmano y diferentes modalidades de atletismo. Pero en toda conversación que se preciara, tenía que aparecer Perico Delgado y, poco después, Induráin y sus gestas en el Giro de Italia y el Tour de Francia. Montañas como el Mortirolo, L'Alpe d'Huez o el Tourmalet emanaban dosis de patriotismo épico a imitar.

Más adelante, empecé a seguir las retransmisiones deportivas como forma de evadirme durante la época de exámenes. Mi favorito era el tenis. Los torneos "Conde de Godó" y, sobre todo, el "Roland Garros", amenizaban las mañanas de Mayo y Junio, que transcurrían entre el frigorífico y Nietzsche. Pero incluso me seguía atreviendo a practicar deporte con mis amigos de Palencia. Eran míticas nuestras excursiones en bicicleta por los montes próximos, así como las continuas revanchas al tenis en las Eras de Santa Marina.

El deporte también me distrae ahora. Dentro del modelo de vida apresurado que me he dado, tan sólo queda hueco para el gimnasio. De vez en cuando cae algo de piscina y carreras varias, si es que el andar acelerado cuenta. Para ver un domingo desde el sofá, prefiero las motos, el tenis y los grandes partidos de fútbol, pero durante los Juegos Olímpicos me trago todo. Todo ello porque:
  • La sonrisa aniñada de Stoner queda siempre estupenda en el podium de GP.
  • Me encanta disfrutar con la imagen del culo de Nadal, apretado entre sus pantalones piratas blancos.
  • Vibro con la selección española en esta Eurocopa, que tanta testosterona genera a lo ancho del país, para alegría de todos.
  • Y ya estoy esperando el escenario que habrán preparado los chinos para los saltos de natación. La figura estilizada de sus protagonistas quedará muy plástica, esbozando figuras imposibles desde la plataforma.
Sí, definitivamente me he amariconado.




lunes, 16 de junio de 2008

Sombras difuminadas


Uno de los mayores síntomas de niñez es considerarse maduro. Me ha pasado en todo momento de mi vida. Siempre me veía más responsable de lo que se terciaba alrededor, considerando que era imposible serlo aún más. Luego, con el tiempo, te das cuenta de que estabas equivocado. No sé si se trata de aterrizar sobre un tejado más alto o si, más bien, es simplemente cuestión de evolución de la forma de afrontar los retos. Cada cual interpreta la madurez a su manera. La mía me gustaría que girara en torno a la idea de volver a ser un niño. Un niño protegido.

Tengo 31 años. Y creo que ya no puedo más.

sábado, 14 de junio de 2008

Las maldades del alcohol


Saltos desparramándose entre un delirio colectivo, sexualmente revolucionado.
Un mini de mojito, pagado como un tubo en un quiosco de comunistas cubanos (así les va).
En el aire, olor a fritura de gallinejas y entresijos.
Modernas por doquier, con pitillos azul Diesel y mochilas a la espalda, confundidos entre chulapones de cuento.
Sonidos pop compitiendo con los electrónicos que emanan del tradicional carrusel del pulpo.
PSOE y PP, enfrentados con sendas casetas, presidiendo la escena.
Retos cumplidos, ¿por qué no me iba a atrever?.
Visiones fantasmagóricas.
Camisetas de perdición que invitan a un suspiro profundo.

Y si no duermo, ¡¿qué?!

¡Es Madrid!

domingo, 8 de junio de 2008

Sonrisa vertical


Necesitamos estar optimistas. Aunque nos cueste asumir que a veces el otro puede estar más distante o triste o receloso. Porque es un estado de ánimo tan natural y respetable como el encontrarse feliz.


Sin embargo, a la hora de recordar, sólo nos interesa retener los momentos más alegres. Cuestión de supervivencia, supongo. Por eso, en las fotos, salimos siempre sonriendo.




viernes, 6 de junio de 2008

Llorones


Una gran zona de céped, con tres sauces llorones, uno en el centro de un fondo y los otros dos en las esquinas del extremo opuesto. La casa en primer plano, coronada por una chimenea humeante. Y, omnipresentes, en el lateral izquierdo, los columpios: peligrosos, divertidos.

Cuando en el cole me pedían hacer algún dibujo, yo era monotemático. Siempre había una excusa para plasmar esta escena que me resultaba tan cotidiana. Pasé mi infancia - juventud en lo que llamaba la tierra, una finca rústica a las afueras de Palencia. Hasta que algunas circunstancias obligaron a deshacernos de ella.

Con imaginación, mis padres supieron transformar lo que fue un campo de trigo en un lugar donde pasar las horas de ocio. Con mucho sudor de por medio. En cuanto tuve algo de razón, me lancé a ayudar en todo lo posible. Junto a mi abuelo, aprendí a cultivar lechugas, tomates, judías, pepinos, calabacines, patatas, cebollas, ajos, pimientos, puerros, guisantes, setas, fresas...
Sabía distinto comer directamente del árbol almendras, moras, melocotones, peras, manzanas, grosellas, cerezas o ciruelas. Quizá porque conocía la dureza de todo el trabajo previo que había llevado recoger el fruto. Luego llegaba la época de hacer mermeladas, cocer tomate para conserva o los veranos interminables en los que día sí y día también comíamos judías verdes.
Por no hablar de las tareas relacionadas con el cuidado del jardín, la albañilería en general o la mecánica.

Gracias a la tierra pude aprender de verdad el valor de las cosas y el esfuerzo que supone conseguirlas. El acercamiento al entorno servía para una constante reconciliación conmigo mismo. Difícil de creer, para quien sólo me conoce en mi faceta de urbanita actual. Pero mi forma de ser es heredera de lo aprendido en aquellos tiempos. Lo que soy, hunde sus raíces en la maduración personal acelerada que viví allí. La mejor formación que jamás he recibido.



lunes, 2 de junio de 2008

El parte


Parece que hoy se pone fin a un episodio de seis semanas de lluvias casi generalizadas. El anticiclón de las Azores se descolgó hacia latitudes más meridionales de forma inusualmente prolongada para esta época del año. Ante ello, dejó vía libre a una sucesión de borrascas atlánticas que, realimentadas al rozar el Mediterráneo, quedaban ocluidas junto a la costa debido a las altas presiones que presidían la península italiana. Los pantanos se han llenado hasta el punto de que alguno ha tenido que abrir sus compuertas por cuestiones de seguridad. Se da, pues, por concluida la pertinaz sequía.


Intuyo que de forma inmediata llegará el verano. Al menos tres meses por delante de infierno madrileño. Mucho calor, bochorno insoportable. Incluso ahogos y sofocos. Por motivos varios. Habrá que ensayar el boca a boca.




viernes, 30 de mayo de 2008

A ver quién pone una excusa


Estás hecho una puta, le solté con mala leche a mi monitor. Me puse celoso. Se llevaba toda la tarde hablando con el chico que en otro momento y lugar califiqué como un sueño hecho realidad. Y eso no se lo perdono. De todas formas, hay que reconocer que Jano, mi monitor, se sabe relacionar muy bien en el gimnasio. Sólo se habla con los más monos.

Ayer, cuando entré al local, estaba tumbado enseñándole no sé qué ejercicios a una chica nueva. Cuando me vio:

- ¿Cómo no me has saludado al entrar?

- Porque estabas ahí tirado.

- Pues haber venido a hacer lo mismo, ¿no?

(LA PRIMERA)


Luego, como le notaba muy feliz, se lo hice saber:

- Te veo muy contento, ¿es mi imaginación?

- Claro, como has venido hoy...

(LA SEGUNDA)


Cuando terminé mis ejercicios, decidí no volver a casa, que tenía ganas de Madrid. Se lo conté:

- Creo que me voy de vinos y tapas ahora, me llama la atención el alcohol.

- Uhmmm, suena muy interesante, a ver cuándo me llevas.

- Cuando quieras, ya sabes, cualquier día, cuando plegues a las 10.

- Pues a ver si es verdad guapo.

(LA TERCERA)



Jano es mexicano y apenas conoce gente en Madrid. Por eso, cuando organiza alguna fiesta en casa, junto a su pareja, suele invitar a socios del gimnasio. Me ha invitado a una para el próximo viernes. Me imagino quién podrá ir... Lo voy a pasar fatal.





jueves, 29 de mayo de 2008

Economía doméstica


¿Por qué los cajeros del Mercadona parecen más felices que los del Carrefour Express?


Dudo de si:

  1. Será cuestión de la genética por la que se opta durante el proceso previo de selección de empleados.

  2. Si, por el contrario, se debe a las mejores condiciones laborales que ofrece la empresa catalana sobre la francesa.

  3. O, por último, si los clientes del Mercadona son más guapos y eso, quieras que no, anima al personal.





miércoles, 28 de mayo de 2008

Esto es cosa de Patricia


Simyo inicia una campaña publicitaria enfocada hacia el público gay.


Desconozco si habrá que hacer alguna demostración especial para poder acogerse a estas ofertas.


En todo caso, ¿las pruebas se parecerán a las que realiza Zara para contratar a sus dependientes?






martes, 27 de mayo de 2008

Cubismo




300 kilómetros por hora hacia Poniente. No es demasiada velocidad como para olvidar tu cara ilusionada de niño, despidiéndome desde el otro lado del andén.

Aún tiemblo al recordarte cogido en mis brazos, en vuelo, bajo la ballena metálica. ¿Ves como de algo sí que sirve el gimnasio?




jueves, 22 de mayo de 2008

Aparente contradicción


Las bajas presiones relativas presiden la primavera. Por eso, está resultando complicado disfrutar de esta vital sensación por las mañanas.

Son las 07:49h. Al bajar por la calle Argumosa se puede observar el frenético ritmo que ya preside la zona de servicios del Museo Reina Sofía. Caminando bajo el vidrio y el metal diseñado por Jean Nouvel, algo va a ocurrir al dejar atrás la puerta del restaurante de Sergi Arola. Justo al doblar la esquina y acceder a la Ronda de Atocha, los vigorosos rayos de sol se desparraman ya entre el grupo de figuradas aladas de bronce que rematan el ático del edificio del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino.


La luz ciega y, al cerrar los ojos, se puede ver todo mucho más claro.




martes, 20 de mayo de 2008

Primerizo


- ¿Has visto lo mismo que yo?
- No sé, depende, pero ufff, termino fatal hoy.
- Te digo el niño este nuevo, que salía super duro de las duchas.
- ¿El que estaba a tu lado? ¡Ah!, sí, se empalmó conmigo allí dentro.

jueves, 15 de mayo de 2008

Mi cartera


  • Un cupón de descuento del 10% en pescadería fresca para el Carrefour Express.
  • Otro cupón del Carrefour para la compra de detergentes y suavizantes de ropa con un 15% de descuento.
  • Cuatro T-10 de una zona emitidos por Transports Metropolitans de Barcelona.
  • Un cheque regalo de 7,5 € para gastar en Parfumeries Marionnaud.
  • Un cupón de descuento de 5 € para la compra en la FNAC de un DVD de importe superior al 11,95 €.
  • Tres Eurovips (doble valor de lunes a jueves si se gastan en hostelería a partir de las 20:00h).
  • Ocho tickets Restaurante Pass, de Sodexo, por los que me ahorro IRPF de mi nómina.
  • Tarjeta de crédito del Club Vips, que me devuelve el 1% de las compras en dinero Vips.
  • Tarjeta de crédito de Halcón Viajes, que me devuelve el 1% de las compras en dinero Halcón.
  • Tarjeta Solred, para pagar la gasolina y las autopistas un 2% más baratas.
  • Y varias tarjetas de fidelidad: Marionnaud, Europalma, Desigual, Gas, Carrefour, Club AVE, Iberia, Spanair, Springfield, Travelclub, Boulanger, Cinesa.

Tengo dudas de si todas estas muestras evidencian síntomas de inteligencia o más bien de pobreza.


miércoles, 14 de mayo de 2008

Compromiso Fase II Opción a)


Hoy casi me echo a llorar en el lugar más inoportuno, para mostrar aún de manera más evidente mi tradicional patetismo. En fin, de todos modos, en algún momento tenía que ser.

Sueño con la muerte. Creo que no estoy muy bien.


domingo, 11 de mayo de 2008

La respuesta fría


La calefacción se enciende en mi casa desde el mes de Septiembre hasta Mayo. Incluso, puntualmente, alguna tarde desapacible de principios de Junio o de finales de Agosto.

Mi madre es friolera y, desde que dejó a un lado la incomodidad del carbón, tiene menos reparos en atemperar los radiadores. Apuesta siempre por la abundancia (mucha comida en la mesa; la terraza llena de flores de todos los colores; mucho calor en la casa).

En Palencia hace frío. El verano del año pasado creo que cayó en miércoles. Quizá sólo sea mi impresión, pero últimamente me parece incluso más gris. Y triste. Sin ánimo de ocasionarme inquietud ni malestar, mi madre insiste en que regrese a la tierra. Sugiere, con más ironía que otra cosa, que ella misma me busca un trabajo. Mamá, ¿y qué hago yo aquí?, le suelo contestar con una dureza que no se merece, pero que me sale del alma.


viernes, 9 de mayo de 2008

Reducir la disonancia cognitiva


Hay ciudades que acogen. Y otras que no. Se trata de una sensación íntima que se puede apreciar simplemente con el primer contacto. Sin embargo, no deriva en lo contradictorio el hecho de que, de forma simultánea, dicha ciudad te apasione. Hablo, por tanto, de todo menos de lo racional.

La cara de Barcelona muestra el escenario perfecto para un turista, sobre todo extranjero (ajeno a cualquier nación de las que componen el Estado español, quiero decir). Franceses, italianos, ingleses, alemanes y americanos la gozan ante el escaparate que ofrece su explosión contenida de vida. La riada de gentes tan variopintas que cambia cada día quizá reduce su personalidad. El grado de esta observación se incrementa cuando se es consciente de lo complicado que resulta averiguar qué hace un catalán un sábado por la tarde o un domingo por la mañana. ¿Dónde se han metido? Entre tanto rubito y niña nórdica despendolada, cuesta descubrirlos.

Un truco: buscar los contrastes de Barcelona, su cara aparentemente menos amable, pero que, al restar artificialidad, reconcilia con la ciudad. Claro, que también queda la opción de tener a tu propio catalán.


jueves, 8 de mayo de 2008

Como agua de Mayo


Llueve. El campo se encuentra en el periodo más verde de todo el año. Ha cambiado el tiempo en el momento más oportuno dentro del ciclo de maduración del cereal, cuando comienza a aparecer la espiga y el grano toma volumen.

Se presume, por tanto, una gran cosecha, si el pedrisco de última hora no la echa a perder. De esta forma, servirá para compensar en Castilla el enfriamiento del resto de sectores de su reptante economía. Sin embargo, los agricultores no percibirán íntegramente los beneficios derivados de esta situación. Una horda de especuladores metidos a inversores, contratistas y distribuidores harán su correspondiente negocio.

Pero no pasa nada. Siempre quedarán los chinos, que consumen mucho ahora; o una tormenta en el sudeste asiático, que habrá reducido los rendimientos agrícolas; o el biodiésel o lo que sea para justificar una nueva extraordinaria crecida del precio de los alimentos. Perjudicados: los de siempre, los más pobres. Pero no pasa nada. A seguir especulando y a invertir en opciones y futuros de trigo, arroz y demás productos básicos, porque del dólar ya no se fian y las bolsas están bajo mínimos.

¿Quién trabaja de verdad en este país? O donde sea...



lunes, 5 de mayo de 2008

Que te compre quien te entienda


Fulanito tiene 30 pesetas.
Si Fulanito le da a Menganito un duro por su cromo del Renault 25.
¿Cuántas pesetas le quedan a Fulanito?


Prácticamente todos los ejemplos de matemáticas del cole estaban protagonizados por los mismos personajes: Fulanito, Menganito y, en caso de necesitar a un tercero, Frutanito. Estábamos muy familiarizados con ellos, formaban parte de nuestro día a día. Por ello, no acertaba a comprender el cabreo de la profe con mi hermana, cuando le recriminó el que, durante el recreo, gritara a una niña ¡Fulanita!

En aquella época mis padres también hablaban en un lenguaje cargado de oscuridad. Por ejemplo, recuerdo cuando me decían, aludiendo a mis ya demostradas rarezas: ¿Quién te la comerá? Todavía sigo dando vueltas a tal expresión. Porque me resulta impensable que quisieran darle el significado que ahora enseguida se me viene a la mente.

Pero la frase que más me repetían entonces era: Que te compre quien te entienda. Por lo incomprensible que era, ¿acaso mis padres me querían vender? ¿Cuánto pagarían por mí? En las conversaciones actuales, el precio de alguien tiene ciertamente connotaciones algo diferentes.

Nos hacemos cada vez menos inocentes (no sé si también más maduros). Con lo fácil que se manejaba uno dentro de un cuento... Pero, aunque las novelas actuales se encuentren mucho más elaboradas, lo que nunca puede faltar es un príncipe con el que se pueda soñar.